Llegar a Chile, instalarse en Santiago
jueves, 20 septiembre, 2018
La mayoría de quienes llegan a Chile tanto por turismo como para buscar una oportunidad académica o laboral, lo hacen a través de su principal terminal aérea: el Aeropuerto Comodoro Arturo Merino Benítez, conocido también por su antiguo nombre en lengua originaria de “Pudahuel” (charco entre los charcos y que da origen a la comuna del mismo nombre), ubicado en la zona norponiente de la ciudad, al que llegan las principales aerolíneas del mundo y que cuenta con una nueva zona remodelada, numerosos estacionamientos y una gran conectividad para llegar a todas las zonas de la capital chilena, a través de autobuses o empresas de transporte privado.
Desde el Cono Sur de América, también es posible llegar a Chile en autobús. Por ejemplo, quienes viajen desde Venezuela, pueden elegir esta opción mediante un viaje a través de Brasil y Bolivia.
Otra opción es la Cordillera Andina, por Colombia-Ecuador y Perú. Ambos tramos pueden demorar hasta siete días.
Los requisitos de ingreso a Chile son cédula de identidad o documento nacional de identidad, pasaporte vigente y vacuna contra la fiebre amarilla.
Santiago de Chile está dividido en 35 comunas, las que se diferencian mucho entre sí, pero que, sin excepciones, cuentan con gran conectividad al centro de la capital.
Después de las comunas de Providencia y Las Condes, al oriente de la ciudad y parte de la zona más acomodada metropolitana, la principal es Santiago, donde se encuentra la sede del Poder Ejecutivo, todos los servicios públicos, la línea matriz del Ferrocarril Metropolitano, Metro, comercio, oficinas y una potente oferta cultural. Santiago es la preferida por los inmigrantes para comenzar su vida en Chile.
Santiago cuenta con un transporte público funcional y organizado que, como en las grandes urbes, tiene momentos de congestión, especialmente los días laborales.
El sistema de Metro y autobuses está integrado en una compleja pero eficiente red que permite llegar a todos los rincones de la ciudad, usando la Tarjeta Bip, una cédula magnética que evita el pago en dinero efectivo y que es posible recargar por internet, en el comercio y en las estaciones de Metro.
El Metro de Santiago es uno de los más extensos, eficientes y modernos de América Latina, con una red de alrededor de 103 kilómetros y cinco líneas vigentes y otras dos en construcción. Es posible acceder a sus carros, la mayoría en red subterránea, de 6 am a 23 pm.